Una pregunta constante en consulta es: ¿Qué es el glaucoma? Glaucoma es una patología visual que provoca la pérdida gradual y definitiva de la visión. En un estudio reciente, la Organización Mundial de la Salud (OMS) determinó esta enfermedad como la segunda causa de ceguera irreversible a nivel internacional. Entidades sin fines de lucro, instituciones médicas y centros de atención a la vista abogan por educar a la población en la prevención de esta enfermedad, pues detectada a tiempo, sus efectos negativos pueden reducirse.
¿Qué es el glaucoma?
El glaucoma es una enfermedad de la vista, que ataca directamente el nervio óptico de los ojos, causando la pérdida gradual y definitiva de la vista. Bajo los efectos de esta patología, la presión ocular del ojo aumenta, causando un daño gradual en la retina que si no es detectado a tiempo puede terminar en ceguera irreversible.
Como es el caso de otras afecciones visuales, el glaucoma también presenta diversas tipologías. Éstas responden a causas y cuadros clínicos diferentes, por tanto el tratamiento variará en dependencia del caso específico. Hasta la fecha, los oftalmólogos han determinado como los tipos principales:
- Glaucoma congénito. Es uno de los más conocidos por los pacientes, aunque no el más común. Su aparición se debe a herencia genética y puede corregirse con medicamentos o cirugía si no presenta complicaciones.
- Glaucoma de ángulo abierto. Estudios médicos definen que el 90 % de los casos de glaucoma se corresponden a esta patología. Se produce cuando un aumento de la presión ocular causa una obstrucción lenta en los canales de drenaje del ojo.
- Glaucoma de ángulo cerrado. Como en el caso del glaucoma de ángulo abierto, en esta tipología también hay una obstrucción de los canales de drenaje del ojo. La diferencia es que ese “tapón” se produce en forma repentina, porque lo que es más difícil de detectar y es más peligros. Es una de las formas menos de frecuentes de glaucoma y requiere atención médica inmediata.
Existen otras subcategorías para esta enfermedad, que dependen de las especificidades que vaya presentando la patología pero, por lo general, se engloban dentro de los tipos principales anteriormente mencionados.
IDENTIFICA A ESE ENEMIGO SILENCIOSO
Si bien es cierto que cada tipología de glaucoma presenta sus propias características, también lo es que nuestro cuerpo nos da señales de alarma que pueden ser válidas para todos los casos, a la hora de ayudarnos a detectar este problema.
El aumento de presión ocular, que es la causante del glaucoma, puede dar diferentes indicios a los largo del desarrollo de esta enfermedad, que aparece en ambos ojos pero comienza primero por uno. Algunos de los síntomas principales son:
- Dolor de cabeza
- Náuseas
- Visión borrosa
- Aparición de halos arcoiris alrededor de las luces brillantes
Muchas de las enfermedades visuales “avisan” su aparición con síntomas parecidos. Esto puede generar confusión, y muchas veces lleva a los pacientes a restar importancia al asunto hasta que ya es demasiado tarde. Es importante no automedicarse y ante la mínima señal de anomalía en la vista, acudir al oftalmólogo para recibir un diagnóstico real y acertado. Prevenir ayuda a reducir las consecuencias de esta enfermedad en la sociedad.
TRATAMIENTOS PARA EL GLAUCOMA
Una de las preguntas más frecuentes en los pacientes de glaucoma, es si esta patología tiene cura. A diferencia de otras enfermedades de la vista como los defectos refractivos o las cataratas, el glaucoma no puede ser “curado” una vez aparece. La vista que se pierde por los efectos del glaucoma no se recupera, pero si se actúa a tiempo, se puede conservar la visión restante y mejorar muchísimo la calidad de vida con esta enfermedad.
El tratamiento para esta enfermedad puede realizarse mediante medicamentos, en gotas oculares o pastillas de ingesta oral.
También, bajo prescripción de un oftalmólogo, se puede realizar la Trabeculoplastia con Láser, uno de los métodos quirúrgicos que ayudan a drenar el líquido de los canales del ojos, disminuyendo la presión ocular y sus efectos. Existen otros tratamientos de intervención como la Iridotimía con Láser y la Cirugía de Glaucoma mínimamente invasiva con dispositivos de derivación.
PREVENCIÓN DEL GLAUCOMA, ¿ES POSIBLE?
Si bien algunas enfermedades aparecen sin causa aparente, debido a factores genéticos y externos, mantener un estilo de vida sano ayuda a prevenir muchísimas afecciones. El glaucoma no es la excepción.
Investigaciones médicas han demostrado que la hipertensión, puede ser una de las causantes de la aparición del glaucoma. Por eso se recomienda una dieta balanceada, rica en Vitamina A y nutrientes, así como la realización de ejercicios al menos una vez a la semana.
La protección de la vista ante los rayos UVA con lentes solares adecuados, la exposición controlada ante aparatos electrónicos como computadores y celulares, y el descanso adecuado son estrategias que ayudan para prevenir la aparición de esta enfermedad.
Aunque se estima que las personas más sensibles al surgimiento de esta patología son aquellas con ascendencia afroamericana mayores de 40 años, así como las mayores de 60 años, es recomendable que una vez realizarse un chequeo anual para prevenir y acudir al médico ante cualquier señal de anormalidad.